lunes, 27 de octubre de 2014

MARLON BRANDO y la VERDADERA MAFIA en EL PADRINO. (1ª parte )


Se ha comentado muchas veces que la mafia, la de verdad, tuvo acto de presencia en el rodaje de "El Padrino". Se dice por ahí que Coppola, de origen italoamericano, pidió permiso expreso a las familias de Nueva York para rodar en lugares de Little Italy, también se habla de tratos de la Paramount con dichas familias de la "cosa nostra". 

El tema de la mafia me apasiona sobremanera, y buena culpa de ello lo tiene esta película, que me fascinó cuando la ví, y me cambió la forma de ver el cine. 

Os copio un fragmento de "Las Canciones que mi  madre me ensñó" maravillosa autobiografía de Marlon Brando en la que relata su experiencia con la verdadera mafia neoyorquina durante el rodaje de The Godfather.




Marlon Brando: -" Desde el principio la mafia real se interesó vivamente en nuesra descripción de la mafia de ficción; muchas escenas se filmaban en su territorio de Little Italy en Nueva York. Esta envió una delegación para hablar con Bluhdorn, quién, según me dijeron cuando la película estuvo terminada, estuvo de acuerdo en tener en cuenta ciertas condiciones para obtener su cooperación, entre ellas no mencionar la palabra "mafia" en toda la película. Estoy seguro de que le hicieron saber que a sus amigos de los sindicatos de Nueva York no les resultaría díficil paralizar el rodaje, y supongo que como pago parcial, la Paramount les prometió darles algún trabajo en la película. Varios individuos del equipo técnico pertenecían a la mafia, y cuatro o cinco mafiosos interpretában papeles sencundarios. Mientras rodábamos en la calle Mott, en Little Italy, Joe Bufalino se presentó en el plató y envió dos emisarios a mi caravanacon el mensaje de que quería conocerme. Uno de ellos era un sujeto con cara de rata que tenía el pelo impecablemente engominado y llevaba un abrigo de pelo de camello. El otro, menos elegantemente vestido, tenía el tamaño de un elefante; al entrar en la caravana estuvo a punto de volcarla y me dijo:   -Hola, Marlo, eres un gran actor. 





Cuando llegó Bufalino lo primero que noté fue que uno de sus ojos miraba a la izquierda y otro a la derecha. Como no sabía a cuál de los dos mirar, miraba a uno y a otro alternativamente, procurando no ofenderlo. En cuanto se sentó empezó a quejarse por lo mal que lo trataba el gobierno..." 

"... como si los dos formarámos parte de una conspiración añadió: - verás, Marlo, me encantaría que pasaras por casa y conocieras a la paarienta. Una noche podríamos salir los tres a cenar. Me gustaría que conocieras a mi familia" 

Marlon Brando relata como le dió largas, hablando de lo complicado que era con el trabajo de estudiar el guón, ante la negativa de Bufalino, el actor lo invitó a conocer el plató, y ocurrió una anecdota graciosa: 
"... Miro a su alrededor, (Bufalino) y comentó:

 - No sé como no te vuelves loco con toda esta gente, todos estos cables y todo lo demás. 
 - Tienes razón, Joe. Todo esto es para quedarse bizco, ¿No crees?. 

Entonces lo miré a los ojos y me dí cuenta de lo que acababa de decir. Gire bruscamente esperando distraer su atención hacia el plató y para ver como reaccionaba..."   



Hasta aqui la primera parte de laversión que relata Brando sobre su experiencia con la mafia. Pero no acabaría aqui, más tarde le ocurriría algo más con la "cosa nostra", aunque eso lo dejo para otra entrada. 

Fuente: "Marlon Brando: Las canciones que mi madre me enseñó"  Ed. Anagrama, 1994.




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