Lo del Serrat me viene de cuna, desde que tengo uso de razón esa voz que tiembla en la garganta de Joan Manuel ha sonado en mi casa. Lo de Joaquin, mas o menos parecido, aunque fue mas cosecha mia, aquel disco 19 dias y 500 noches me robo el corazon adolescente, y muchos años de aguantar como se reian mis amigos de mi. Lo siento, no me gustaba Melendi, ni el Arrebato, ni El canto del loco, a mi me molaba Joaquin Sabina, y su acidez, y su tristeza cronica, y su corte de mangas al olvido,y su mala salud de hierro y sus mas de 100 mentiras...
Así que despues de toda una corta vida escuchando a estos dos "pajaros" y después de una maravillosa gira juntos, gira que disfrute asistiendo a 3 conciertos, en Málaga, Granada y el mas glorioso, con mi amigo Juaki, en Ubeda, la tierra del maestro. Ahora sacan un disco juntos, con letras compartidas y estilos que se reconocen aunque se mezclan y diluyen creando un disco no tan Sabina ni tan Serrat, pero digno de escuchar una y otra vez y digno de degustar, de analizar cada fragmento y dejarse llevar por otra obra que supera la media de lo que se edita cada mes por aqui. Para reirse un poco del hástio que esta generando la situación que vivimos. El titulo del disco es un "made in Sabina " absoluto, ya uso ese discurso en su gira Ultramarina, hace ya como 6 años o puede que más, cuando decia que su orquesta parecía la orquesta del Titanic, porque seguia tocando mientras el se hundia. Y mira, finalmente, nos ha servido de titulo para un disco que, junta a dos "TItanics" de la música española.
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